Intervención realizada en el Pleno Ordinario de 20 de noviembre de 2023

En primer lugar, desde este Grupo Municipal queremos mostrar nuestra solidaridad y apoyo a la plantilla de Aernnova. Apoyo y solidaridad que hacemos extensivos a todo el conjunto de la clase trabajadora de cualquier, y en especial a la del sector aeronáutico, por ser éste tan importante en nuestro municipio, ante las prácticas y estrategias empresariales que buscan aumentar el beneficio por encima de cualquier otra consideración.

Como no podría ser de otra manera, nuestro grupo estará en contra de cualquier política que tenga como objetivo el abaratamiento de las condiciones laborales a costa de los derechos de los trabajadores. Como podrán comprender estas prácticas son algo más que indignantes, son inaceptables.

Debemos ser conscientes de que es la clase trabajadora, la mayoría social, las que mantienen, día a día a esta sociedad a flote. Por su número e importancia, debe tener toda la prioridad en cuanto a la orientación de las políticas públicas. Esas son las bases de la democracia y el Estado del Bienestar: el interés general. Y no hay nada más general y de mayor interés que la gente de la calle, los trabajadores, el común.

Situémonos por un momento en la planta de Aernnova —o en cualquier otro centro de trabajo— y pensemos qué sería si no contara con la asistencia diaria de las mujeres y hombres trabajadores que desempeñan sus funciones. No sería más que una cáscara vacía, sin actividad, sin función alguna. Una fábrica sin trabajadoras y trabajadores no puede producir nada, y de esa idea nace el derecho de huelga —tan largamente discutido, negado y recortado por los patronos—. Démosle la vuelta a esta imagen: ¿qué sería esta planta sin consejos de administración, sin empresarios, sin fondos de inversión —o fondos buitre— a la cabeza? Sin duda la respuesta que antes les viene a la cabeza es la de una cooperativa. Y con ella en mente, respóndanse, ¿cuál es la parte importante, la mayoría trabajadora que crea la riqueza o la minoría empresarial que la recoge, atesora y no distribuye? Acabemos ya con la manida falsa idea de que el empresario crea riqueza: la crea quien transforma, quien trabaja, quien pone su cuerpo, su talento.

Esta no es sino la segunda declaración institucional —igual de necesaria que la primera— contra las prácticas de esta empresa que se trae a Pleno en estos últimos tres años, lo que nos da una idea acerca de la reincidencia en la directiva de la empresa, algo que no nos puede sorprender si sabemos que en su accionariado se encuentra la firma de capital riesgo Springwater. Estas firmas de capital riesgo y «situaciones especiales» —un eufemismo que indica que cazan gangas y oportunidades con empresas en quiebra— llegaron en los días posteriores a la crisis y han vivido durante casi una década del dinero regado por contratos públicos y subvenciones.

Debemos preguntarnos, al igual que lo hizo CCOO, cómo una empresa que es Tier 1 de Airbus puede estar pasando por un proceso donde alega causas económicas, sin olvidar, como hiciera el secretario general de UGT FICA Sevilla, que no hace ni cuatro años que se realizó una inversión millonaria. La burla a todas las partes que hicieron posible su crecimiento: trabajadores, sociedad, instituciones, no es sino un peldaño más en un proceso de desmantelamiento de empresas que, alegando causas económicas cierran filiales en España para trasladar la producción a países con una regulación laboral más laxa, como Rumanía o India. En el camino, millones de euros de impuestos dilapidados, centenares de familias con oscuras perspectivas y un flaco favor a un sector en auge como el aeronáutico sevillano.

Insistimos en la necesidad de un mayor diálogo social, una mejor cultura de negociación colectiva en las empresas, control sobre las ayudas que se les otorgan a las empresas para evitar la progresiva destrucción industrial y, con ello, la de los puestos de trabajo.

Todas las administraciones, desde la local, como hacemos hoy, hasta la europea tienen que implicarse en esto. Muy especialmente la Junta de Andalucía que es quien mayor competencia tiene en este asunto y a quien instamos para que, desde el diálogo con el nuevo Gobierno, encuentre una solución de firme compromiso y carga de trabajo para los trabajadores directos y los miles indirectos.